Fresera de colgar en tonos terracota con colgante de metal adornado con motivos acaracolados. Una pieza tradicional de la cerámica rambleña con un importante valor estético. Perfecto para plantar fresas como su nombre indica, o para cualquier otro tipo de planta o flor que cuelguen por sus orificios. Aunque por sí sola ya es un elemento decorativo sin necesidad de relleno adicional. Consigue más piezas de cerámica artesanales como esta en nuestra web.
Terracota
Nº 42 - FRC - 44 cm de altura